En el siguiente vídeo  podemos ver como se realiza el ancestral proceso del pisado del pimiento.

Tras dos semanas de permanecer los pimientos deshidratándose lentamente al calor de las lumbres,  este ha alcanzado su momento álgido de secado,  y es entonces cuando se retira el fuego y se limpia escrupulosamente la parte de abajo del sequero, se abren las trampillas del piso superior y se va echando por ellas todo el pimiento al piso de abajo. A continuación se procede a pisar el pimiento; varias personas con palas de maderas van golpeando al unísono el suelo con fuerza para ir triturando el producto y que se quede en trozos lo mas pequeños posible. Por último se «encaña», que consiste en meterlo en unos sacos grandes para llevarlo al molino.

 

El pisado del pimiento tiene una doble finalidad, por un lado hacer mas fácil la molienda y por otro, que el despezonado en el molino sea mucho mas efectivo, ya que en numerosos casos el pimiento llega ya a este habiendo perdido el pedúnculo o pezón. Es cada vez menos frecuente la realización de este proceso, acudiendo los pimentoneros al molino con el producto entero, lo que provoca que parte del pedúnculo no sea sencillo de quitar y por tanto permanezca en el producto final, haciendo que la calidad disminuya de manera ostensible, pues como ya dijimos en otra entrada el pezón no es otra cosa que madera.

Para que nos hagamos una idea del  cambio que ha sufrido el pimiento desde que entra en el sequero hasta que es encañado decir que merma un 80%, así un sequero grande en el que se meten 8000 Kg se queda en unos 1000 Kg.

 

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